miércoles, 1 de abril de 2009

Moriremos asfixiados

En la supuesta mejor universidad de Madrid llamada Carlos III los alumnos no disponen de las condiciones de seguridad adecuadas. Las ventanas están atornilladas y no se pueden abrir, por lo tanto en caso de incendio quedarán atrapados sus estudiantes, pues tampoco cuenta con salidas de emergencia.
Alguien habrá pensado que, en el peor de los casos, sería posible romper el cristal y saltar... pero esto es imposible, ya que se cuenta con una especie de persianas permanentes que no se pueden ni subir ni bajar –para los que nunca las vieron son una especie de rejas en horizontal–.
Además, aprovecho para decir que un sistema de ventilación tan malo no puede ser bueno. Ni se puede disfrutar del aire fresco de la calle en verano ni del sol en invierno, por no mencionar que la luz del solar se desperdicia totalmente, teniendo que encender las luces en todo momento.
Con esta nueva entrada quiero dejar claro mi descontento con la universidad en este sentido. Hay que cuidar al planeta y hay que ser precavidos ante posibles accidentes.